Con este título inicio una nueva investigación que estudia cómo narraron las Islas Malvinas algunos viajeros europeos entre los siglos XVII y XIX.
Ellos pertenecen a un corpus muy importante de marinos, exploradores y científicos que brindaron información sobre las Islas. Casi todos integran la antigua literatura de viajes que hoy reúne valiosos estudios, cuya amplitud y diversidad requieren un alto nivel de especialización en el tema.
Yo sólo examino esos relatos como narrativas que son tan diferentes como sus autores y los períodos históricos a los que pertenecen. A veces estos textos reescriben otros testimonios, a veces también son producto de reescrituras posteriores.
Mis objetivos son acotados: analizar cómo “leyeron” las Islas y preguntar qué diálogo posible establecerían con ciertas lecturas de Malvinas que realizó la cultura nacional. Sin buscar influencias o vías de transmisión, excepto en el caso de Charles Darwin porque su obra dejó marcas reconocibles en algunos cuentos y novelas nacionales.
¿Por qué no pensar la configuración narrativa de Malvinas como constituida por una serie de capas superpuestas? Ellas construirían una especie de archivo inserto en la ya amplia biblioteca que inspiraron las Islas, donde en determinados momentos podríamos registrar huellas primeras y las reformulaciones que realizaron otros discursos.
En La escritura y la diferencia, Jacques Derrida plantea que si deseamos saber lo que un archivo ha querido decir, no lo sabremos más que en el tiempo por venir
Mi trabajo interroga a ese archivo constituido por distintos relatos sobre las Islas sin esperanza de alcanzar ninguna revelación. Pero lo hace aquí y ahora, en ese tiempo por venir derridiano que ya construyó nuestra cultura
En tanto pertenecen a la historia de Islas que integran nuestro territorio nacional, los registros de Malvinas que realizaron los viajeros extranjeros constituyen capítulos de nuestra historia.
De ahí que estudiarlos hoy, también es una forma de afirmar nuestra soberanía sobre las argentinas Islas Malvinas.